“De repente, abrí mi corazón y sentí una oleada de compasión fluir, más que fluir, llenaba todo mi ser. Fue un momento feliz.”


EL FUNDADOR DE EVERYMAN, GERALD HENRY, NOS HABLA HACERCA DE SU MANIFESTACIÓN Y EL MOMENTO EN QUE NACIÓ LA FUNDACIÓN EVERYMAN:

Era una noche oscura y fría de invierno en la costa oeste de USA. Había alcanzado una larga y profunda meditación. Mi mente estaba conectada a mi mundo interior y silencioso. En ese momento, el hecho de estar encarcelado en la Prisión Federal de los E.E.U.U., era lo que menos importaba.

Paz y tranquilidad permanecieron en mi ser.

Me vire y mire por la ventana, a través del congelado crepúsculo, pude verlo, al más sádico, cruel de los oficiales de la prisión correccional. Él, quien se deleitaba de la tortura mental y quien se consideraba superior a los reclusos que resguardaba.

Allí estaba, acurrucado bajo una luz brillante, con un pesado abrigo de invierno, miserable, congelado y tiritando, con el viento frio que abatían su rostro. El hielo y nieve cubrían la prisión.

La luz brillante que recaía sobre su lado izquierdo, perforó la oscuridad, acentuando su amargura y blanqueaba las facciones de ese lado de su rostro dejando su otro lado en completa oscuridad.

Recordé entonces la imagen que tenía delante de mi era una metáfora perfecta de la realidad de la condición humana.

La luz despojo su máscara, su fachada, y revelo que cada uno de nosotros somos seres humanos condicionados, el equilibrio entre la luz y la oscuridad, que ya no podía juzgarlo más de lo que él podía juzgarme a mí.

En silencio, cogí mi marcador y dibuje la imagen que ves arriba a la derecha (1).

Me quede reflexionando en mi cálido y pacifico mundo interno.

Pensé para mí mismo. Él está tan atrapado detrás de sus propios pensamientos como muros acondicionados, al igual que yo lo hacía con los míos… de repente, abrí mi corazón y sentí una oleada de compasión, que antes no fluía en mi, inundarme todo.

Fue un momento placentero.

A medida que se iban rompiendo las cadenas de mi mente, se detuvo esa repulsión, miedo y juzgamiento que tenía hacia él, vi su verdadero Yo por primera vez, el verdadero ser humano, un hijo de Dios, el hombre, el hijo, el hermano, el padre.

En ese momento lo vi a él y me vi a mi mismo.

Vi hacia abajo, lo que había dibujado y pude darme cuenta que había hecho “Everyman” (“Cada ser”) y agregue esa palabra a mi imagen (2).

Nada cambió en él, pero todo había cambiando en mi. Pude darme cuenta que:


   No importa lo que ha hecho o dejado de hacer,

   — Él era digno de ser amado.


    No importa lo que yo he hecho o dejado de hacer,

   — Yo era digno de ser amado.


    No importa lo que alguien ha hecho o dejado de hacer,

  — Ellos son dignos de ser amados.


Me di cuenta, de manera muy profunda en el centro de mi ser:


    En realidad – Ningún ser humano es más o menos valioso que otro ser humano.


    En realidad – Cada hombre es Everyman.


    En realidad – Tú eres eso.


    En realidad – Todos somos Uno.

Agregue las palabras, “Tú eres eso,” debajo de Everyman y en ese preciso momento, la Fundación Everyman nació (3). Las enseñanzas de los más grandes maestros se fusionaron con la profunda manifestación de ese momento, en la simple realización de la verdad.

“ Everyman – Tú eres eso.”

En ese momento, me dedique a compartir esa verdad con otros quienes fueron despojados de la sociedad.

Y desde ese día, vi solo lo mejor de aquel hombre y se asombro de como yo disfrutaba de esa relación de respeto mutuo que había a partir de ese momento.

Mira a Dios en ti mismo, Mira a Dios en cada uno.

PASO A PASO EL NACIMIENTO DE LA VISIÓN DE EVERYMAN

1.


 

2.


3.



¿Qué ves cuando miras a Everyman?

Esto no fue planeado de esta manera, pero un voluntario señaló que, “Independientemente del punto de vista que tengas de Everyman, tu mirarás hacia la luz, lejos de la oscuridad.”